Legend of Grimrock 2 para Windows

La segunda visita a Grimrock

Con movimientos basados en un juego por movimiento guiado (donde el personaje parece que caminase sobre un tablero de ajedrez), contadores de ataque y un oscuro mundo de fantasía, Grimrock 2 sigue el estilo de su predecesor de 2012. ¿Un cambio de escenario y una interfaz mejorada pueden añadir atractivo a esta aventura D&D en primera persona o es un juego solo para amantes de explorar mazmorras?

Un paso adelante, dos cuadrados atrás

En el primer Legend of Grimrock debías guiar a un equipo de cuatro prisioneros por las profundidades de una cárcel situada dentro de una torre en lo alto de una montaña. Para ganar la libertad debían lograr lo que nadie había logrado antes: moverse entre mazmorras, superar trampas y derrotar a los guardianes.

El movimiento guiado, el combate y la vista en primera persona eran una novedad en juegos del momento, y llamaban a los días de Eye of the Beholder. Los límites angulados de una prisión eran perfectos para esta fórmula, que se hacía muy familiar a medida que intentabas superar los peligros a tu alrededor.

Grimrock 2 es lo mismo... pero diferente. Apresados en una barca, tu grupo de cuatro presidiarios ya han tenido la suerte de sobrevivir a un naufragio y acabar en una isla. Pese a su aparente tranquilidad, sin embargo, no todo es lo que parece y deberán luchar de nuevo contras las fuerzas del mal si quieren la libertad.\n

Un reto de este nuevo escenario es su mundo, más natural. Playas, cuevas y bosques son solo una parte de las localizaciones de Grimrock 2 y ninguna se ajusta al movimiento angulado del juego. Aunque ello no afecta a la estrategia a seguir, sí rompe la tan suspensión de incredulidad tan conseguida en el original.

Pese a este cambio en los escenarios, el gameplay principal sigue siendo el mismo: moverse por la isla superando obstáculos y luchando contra monstruos (o mejor decir escapar de ellos si es que no quieres verte derrotado luchando contra varios a la vez).

Ésta es una de las rarezas de pelear en espacios abiertos, ya que si bien resulta un cambio atractivo al pasar de túneles oscuros a verdes bosques, te encontrarás en ocasiones víctima de ataques imprevistos. Luchar contra enemigos de poco tamaño puede resultar sencillo, pero si son dos, uno detrás y otro delante, resulta una amenaza real.

Complejidad simplificada

Otro gran cambio respecto al original es la interfaz, nueva y mejorada. El primer juego te llevaba casi a ciegas en tu camino, mientras que si en Grimrock 2 sigues estando a tu albedrío, todo es un poco más claro, lo que te da opciones de pelear. Se trata de una concesión a agradecer, en especial para los que acaben de empezar con Grimrock o con un juego Dungeons & Dragons (D&D), y es que el aprendizaje se simplifica sin hacer demasiado sencillo el sistema.

El gameplay principal es casi idéntico. Te mueves dentro de un solo espacio cada vez, con un contador de ataque que otorga y busca dar un cierto ritmo al mundo. Las teclas de movimientos son WASD, mientras que el ratón sirve para moverse por los menús, atacar y mirar a tu alrededor. Buscar te ayudará en tu camino, ya que encontrarás elementos que te servirán. Algunos son para abrir camino, mientras armas y ropa son prácticos para aumentar tus estadísticas.

Tu equipo de cuatro anda unido, con dos miembros por delante que actúan de escudo. Si bien los dos personajes en cola están protegidos, no podrán atacar, a no ser que les proporciones opciones de atacar desde la distancia. Esta dinámica me llevó a jugar con mi ladrón y un minotauro por delante y armados con espadas, seguidos por un arquero y un mago, más débiles. Aunque me funcionó bien, hizo falto gestionar bien ataques y curas para sobrevivir.

Un mundo sólido

El mundo de Grimrock es estático. Si esto tenía sentido en los subterráneos, verlo así en espacios naturales y exteriores lo hace parecer falto de vida. Los colores vibrantes y el detalle de su mundo, unido a su quietud, provoca una sensación artificial. Moverse por lo alto de los árboles es más fácil de lo que parece, gracias a la solidez de estos. Pero hay que decir que el juego consigue aportar siempre variedad, algo que faltaba en el original.

Aunque los movimientos en el exterior son anodinos, dentro de edificios y mazmorras la cosa cambia. Estas construcciones humanas y las murallas de piedra no necesitan movimiento para aportar realismo, al contrario: a medida que desciendes, su quietud se suma a la atmósfera escalofriante del juego.

Más de lo mismo, pero fantástico

Si no has jugado al Legend of Grimrock original, deberías empezar por este juego. Pero para veteranos de la serie, Legend of Grimrock 2 es una continuación genial de la fórmula D&D.